La basílica papal de San Pedro en el Vaticano, oficialmente conocida en italiano como Basilica Papale di San Pietro in Vaticano y comúnmente como basílica de San Pedro, es una iglesia tardorenacentista  ubicada en la Ciudad del Vaticano. La basílica no sólo es la iglesia principal de Roma, sino también la primera de las siete iglesias de peregrinación.

Circo de Nerón

En el siglo I dC, el sitio en el que se ubica la basílica de San Pedro acogió el Circo de Nerón y un cementerio. Según la historia más antígua, San Pedro fue condenado a muerte en el circo y sus restos fueron enterrados en en el exterior. Mucha gente recordaba y visitaba su tumba teniendo en cuenta que  es una de las figuras más importantes de la Iglesia Católica Romana. Esto llevó al entonces emperador Constantino, a comenzar la construcción de una gran basílica sobre la tumba en el año 324. El santuario de San Pedro sigue siendo en la actualidad el foco central de la iglesia.

 

La Basilica de San Pedro original

Después de once siglos, la iglesia original de San Pedro se encontraba descuidada y ya en mal estado. Hubo varios intentos de restauración, pero resultaron en vano. En 1506, se decidió que la antigua basílica ya no podía conservarse. Fue demolida para dar paso a la construcción de una nueva Basilica de San Pedro. La construcción de la nueva basílica de San Pedro comenzó en ese mismo año con la elección del diseño de Donato Bramante. Bramante, sin embargo, no llegó más allá de realizar los cuatro pilares centrales y los arcos de la catedral antes de morir. Rafael tomó su puesto. Tenía otras ideas acerca de la iglesia y decidió trabajar según sus propios planes.

Después de Raphael, Antonio del Sangallo se hizo cargo de la construcción de la iglesia. A pesar de que siguió el diseño de Rafael, quiso tomar parte en su edificación así que decidió demoler la iglesia y reconstruirla.

Miguel Angel

Luego llegó Miguel que devolvió a la iglesia su diseño original hecho por Bramante. Finalmente, Carlo Maderno llevó la construcción de la basílica de San Pedro aún más lejos. La amplió, por lo que la basílica terminó por ser más grande que en su diseño original. Ricas decoraciones cubrieron la basílica, siendo la mayoría de éstas realizadas por Gian Lorenzo Bernini. En 1626, finalmente se completó la estructura.

En el interior de la basílica de San Pedro

Frente a la puerta de bronce hay restos del mosaico de la Navi Celli de Giotto del siglo 13. En el pre frontal hay cinco puertas de bronce. La puerta de la izquierda, también llamada la “puerta de la muerte”, muestra la imagen de Cristo, San Pedro y el Papa Juan XXIII. Esta puerta fue hecha por Giacomo Manzù. Su nombre deriva de su uso tradicional como puerta de salida de los cortejos fúnebres, así como por su tema. La puerta de la derecha, también llamada la “puerta sagrada”, solo debe abrirse para grandes celebraciones por tradición, como los años jubileos. La puerta está completamente amurallada en su interior. La última vez que se abrió fue cuando el Papa Juan Pablo II murió en el 2005.

La Basílica de San Pedro por dentro

En la entrada, pueden encontrarse a cada lado dos arcones con querubines. Estos contenedores están llenos de agua bendita. A la derecha, se llega a ver la estatua de La Piedad que representa a María abrazando a un moribundo Jesucristo. El autor de esta obra fue Miguel Ángel.

Si te encuentras en medio, podrá ver en el suelo una medalla de bronce. Esta simboliza el tamaño de otras iglesias católicas. Sólo de esta manera se puede ver cómo es de grande la Basílica de San Pedro, en comparación con las demás.

 

En la intersección de las naves está el eje fundamental del interior, el baldaquino. Se supone que este es el lugar donde descansan los restos de San Pedro. Este colosal dosel alberga el altar papal y las reliquias sagradas de San Pedro. Artísticamente, también sirve para llenar el espacio vertical bajo una gran cúpula realizada por Miguel Ángel. En la parte derecha del dosel de Bernini hay una escalera y esta conduce a la cripta bajo la iglesia, que es el lugar donde muchos papas están enterrados.

Cuatro enormes columnas sostienen la cúpula que tiene imágenes de santos en el pedestal de cada columna. Estas imágenes  también están en la estatua de bronce de San Pedro. Quienes van en peregrinación a la basílica de San Pedro deben seguir la tradicional costumbre de besar los pies del apóstol.

 

Bernini

Bernini diseñó la espléndida Cattedra di San Pietro (trono de San Pedro) de bronce dorado en el ábside del altar mayor. Las patas del trono están decoradas con bandas de marfil finamente perforadas hechas en la Escuela de Tours.

En el lado izquierdo del crucero, en la parte horizontal de la iglesia que cruza la nave en el dosel, se puede encontrar la tumba de Alejandro VII. Sobre su puerta está la que fue la última obra de Bernini, un esqueleto sosteniendo un reloj de arena. Con esta pintura, Bernini quería expresar lo inevitable que es la muerte.

En la basílica de San Pedro, hay 148 tumbas de papas difuntos. Estas se encuentran bajo la nave de la cripta. La basílica de San Pedro tiene capacidad para unas 60.000 personas.

Dimensiones

395 imágenes
44 altares
135 mosaicos
Superficie de 15 x 160 metros cuadrados